Las dietas altas y bajas en carbohidratos aumentan el riesgo de muerte prematura

Según un estudio publicado recientemente, llevado a cabo en una población de más de 15.000 adultos de entre 45 y 64 años, una dieta alta (más del 70% de las calorías) o baja (menos del 40% de las calorías) en carbohidratos aumenta el riesgo de muerte.

Las personas con una ingesta moderada, en ese rango, tienen una mayor probabilidad de tener una vida saludable, obteniendo el menor riesgo de muerte temprana cuando los carbohidratos se encuentran entre el 50 y el 55% del aporte calórico diario.