Recientemente comentábamos que Nestlé se subía al carro del blockchain. Hoy es Starbucks, que prevé permitir pagar sus productos con criptomonedas. Para ello se acaba de aliar con Intercontinental Exchange, Microsoft y BCG, entre otros, para lanzar una nueva empresa llamada Bakkt que permitirá a los consumidores y administraciones comprar, vender, almacenar y gastar criptomonedas a partir de noviembre.
La plataforma permitirá convertir, en un primer momento, bitcoins y otras criptomonedas a dólares estadounidenses para poder ser usados en Starbucks.